Llega la mitad del año y muchos argentinos esperan con ansias el pago del aguinaldo, un ingreso extra que les permite hacer frente a diversos gastos. Sin embargo, la realidad económica del país limita las opciones de los trabajadores a la hora de utilizar este dinero adicional.
Según relevamientos expuestos en medios de comunicación, la posibilidad de ahorrar o invertir el aguinaldo en viajes o compras grandes es un lujo al que solo un pequeño porcentaje argentinos pueden acceder. La mayoría de los asalariados se ven obligados a destinar esta suma a pagar deudas acumuladas durante el año o a realizar gastos postergados.
Pago de deudas o compras demoradas
Para muchos argentinos el aguinaldo es una oportunidad para aliviar la carga financiera de préstamos o tarjetas y cubrir cifras adeudadas. La prioridad es utilizarlo para pagar pendientes: alquileres, gastos impagos de tarjetas o servicios. El objetivo es mantener la estabilidad económica en un contexto de constantes aumentos de precios.
No obstante, algunos trabajadores no endeudados y que lo pueden hacer, optan por darse un gusto extra con su aguinaldo. Salir a comer en un buen restaurante, comprar ropa o disfrutar de un entretenimiento (recitales, teatros, escapadas turísticas). Esas son algunas de las formas en las que buscan darse un pequeño gusto en medio de las dificultades económicas.
Aguinaldo menos significativos
El hecho de destinar el aguinaldo principalmente a pagar deudas y cubrir gastos refleja la realidad económica y la preocupación de los asalariados en Argentina. El monto del aguinaldo ya no resulta tan significativo como en el pasado, debido al constante aumento de los precios y la pérdida de poder adquisitivo.
En síntesis el aguinaldo en Argentina se destina mayoritariamente a cubrir deudas y gastos básicos, reflejando las dificultades económicas que atraviesan los trabajadores. Los altos precios limitan las opciones de los argentinos para utilizar este ingreso adicional en proyectos personales o disfrutes significativos.
¿Y las inversiones?
Cabe agregar, al margen de la realidad de la mayoría, que aquellos que cuentan con la posibilidad de ahorrar parte del aguinaldo, siempre tienen la opción de apostar a inversiones para hacer trabajar el dinero, como puede ser el plazo fijo o la comprar de acciones o bonos.
