Estados Unidos y China lideran la carrera global por el desarrollo de la inteligencia artificial (IA) y la robótica. La competencia entre ambas naciones no solo define el presente tecnológico, sino que marcará el futuro de la economía y la geopolítica mundial. En este contexto, surge una pregunta clave: ¿qué papel puede jugar Argentina en esta disputa?
El periodista y especialista en economía e inteligencia artificial, Sebastián Di Domenica, analizó este tema en diálogo con Canal E.
Según Di Domenica, China supera actualmente a Estados Unidos en el desarrollo de esa tecnología por la cantidad de patentes de IA que ha generado. 60,000 China frente a 6,000 de EEUU. China a su vez posee una política gubernamental agresiva que prioriza la innovación tecnológica como eje de su crecimiento económico y en el que participa una enorme trama de pequeñas empresas junto con las universidades y el estado.
Por supuesto Estados Unidos también es el otro gran líder en el desarrollo de la IA, pero principalmente a partir de un pequeño grupo de grandes empresas tecnológicas con gran poderío y presencia en el mercado.
En el plano político, el regreso de Donald Trump al poder en 2025 podría marcar una diferencia en el enfoque estadounidense hacia la tecnología. Di Domenica señaló que Trump podría implementar riesgosas políticas de desregulación de la IA, al tiempo que reforzaría su proteccionismo económico. Esto incluiría aranceles más altos para los productos chinos y restricciones en la exportación de chips necesarios para el desarrollo de IA en China.
Argentina entre dos gigantes
Para Argentina, la situación global ofrece tanto desafíos como oportunidades. Según Di Domenica, el país cuenta con talento y creatividad en tecnología, elementos que pueden ser clave para avanzar en la IA y en nuevos desarrollos y servicios para vender al mundo. Sin embargo, señala que el desarrollo local dependerá de la capacidad de formar alianzas estratégicas con ambas potencias. Colaborar con Estados Unidos y China permitiría a Argentina acceder a tecnologías avanzadas y a su vez a nuevos mercados para la potente economía del conocimiento del país.
Además, el especialista subrayó la importancia de una política estatal clara que promueva la innovación, y la asociación entre empresas, universidades y el estado. «El gobierno argentino debería priorizar la formación, la inversión, y la promoción de proyectos para el desarrollo local de la IA», explicó. Estas medidas podrían posicionar al país como un actor relevante en la región y reducir la brecha tecnológica con las grandes potencias.
En un escenario dominado por gigantes tecnológicos, Argentina tiene la posibilidad de destacarse si logra aprovechar su talento humano y establecer vínculos estratégicos. De lo contrario, corre el riesgo de quedar rezagada en una de las revoluciones más importantes del siglo XXI.
