La actividad manufacturera de las pymes descendió un 6,6% interanual en septiembre, acumulando una retracción del 15,1% en los primeros nueve meses del año frente al mismo período de 2023. Este declive es especialmente notable en el sector de alimentos y bebidas, que registró una caída del 8,3% anual a precios constantes en septiembre y una mejora de solo 1,9% en la comparación mensual. Para los primeros nueve meses del año, el sector acumula una baja del 15,5% anual.
El sector de alimentos y bebidas operó con el 62,2% de su capacidad instalada, reflejando una actividad deprimida. Las empresas denunciaron competencia desleal y demandaron mayor acceso al crédito para elevar la capacidad productiva. Además, señalaron que, aunque hubo reducciones en el impuesto PAÍS y algunas bajas de aranceles, esto no se tradujo en una disminución del precio de venta de los productos importados.
La producción de alimentos y bebidas enfrenta desafíos significativos, incluyendo la falta de ventas y los altos costos de producción y logística. Según una encuesta cualitativa, el 17,2% de las empresas en este sector reportaron problemas para pagar salarios en septiembre. La falta de ventas y los altos costos fijos han llevado a muchas empresas a reducir gastos operativos y diversificar su fabricación, incorporando nuevos productos y servicios adicionales.
El uso de la capacidad instalada en el sector de alimentos y bebidas es uno de los más bajos, lo que refleja una actividad económica deprimida. Las empresas esperan una pronta recuperación y destacan la necesidad de reducir impuestos y tasas municipales, así como estímulos a la demanda interna, para mejorar su situación financiera.
Declive y dificultades
La industria pyme en general enfrenta una situación compleja, con una tasa de uso de la capacidad instalada del 60,6%. Los sectores textil e indumentaria, con un uso del 54,6%, y metal, maquinaria y equipo, y material de transporte, con un 60,1%, también reportan problemas significativos. La falta de poder adquisitivo y la competencia desleal son factores clave que afectan a estos sectores.
En resumen, la industria pyme de alimentos y bebidas enfrenta una caída significativa en su actividad, reflejando tendencias económicas más amplias que afectan a las pymes en general. La reducción de impuestos y el estímulo a la demanda interna son medidas esperadas por las empresas para mejorar su situación financiera y operativa.
