El sector de indumentaria en Argentina atraviesa un año crítico, marcado por la fuerte caída en las ventas y el impacto sobre las empresas y trabajadores. Según datos recientes de las cámaras sectoriales, el 72% de las empresas reportó una baja significativa en sus ventas durante el cuarto trimestre de 2024, reflejando el difícil contexto económico que enfrenta el país. Esta situación ha obligado a muchas firmas a adoptar medidas drásticas para intentar sobrellevar la crisis.
En agosto, las ventas del sector cayeron un 8% en comparación con el mismo mes del año anterior y un 2,6% respecto a julio. Este descenso refleja un deterioro progresivo en el consumo, impulsado por la pérdida de poder adquisitivo de los hogares y la elevada inflación. Las liquidaciones y descuentos de hasta el 60% en ropa de marca no fueron suficientes para frenar esta tendencia, y muchos comercios cerraron el mes con una facturación menor incluso a precios corrientes.
El impacto en el empleo ha sido severo. Más del 40% de las empresas reportó haber reducido su personal. Además, un 37% de las compañías está evaluando implementar más suspensiones en lo que queda del año.
A pesar de la baja demanda, los precios de la indumentaria aumentaron a un ritmo más lento que otros productos del Índice de Precios al Consumidor (IPC). Mientras que los precios generales crecieron un 95% interanual, la ropa subió un 61%, lo que sugiere que las empresas han enfrentado dificultades para trasladar los costos salariales y otros incrementos a los consumidores. Este desajuste entre costos y precios ha reducido aún más los márgenes de ganancia.
Promociones con respuesta decepcionante
Eventos especiales como el Día del Niño generaron un leve repunte en las ventas, pero los resultados finales fueron decepcionantes. Las ventas durante esta fecha se contrajeron un 12,5% en comparación con el año pasado, lo que demuestra que ni siquiera las promociones pudieron revertir la tendencia negativa. Este descenso en el consumo se suma a un año donde las expectativas para el cierre del 2024 son mayoritariamente regulares o negativas para más de la mitad de las empresas encuestadas.
A medida que se acerca el final del año, el panorama para el sector de indumentaria sigue siendo sombrío. Si bien el 24% de las empresas mantiene expectativas moderadamente positivas, el 51% de los empresarios espera un cierre de año regular, y solo el 1% anticipa un escenario muy favorable