Por Sebastián Di Domenica. Francisco Ayala es un destacado diseñador de modas argentino, cuyo estudio funciona en la ciudad de Buenos Aires desde el año 1999. Una de sus particularidades es que trabaja en la identidad de la moda local, a partir de la utilización de la iconografía de las distintas culturas precolombinas argentinas.
Actualmente es el presidente de la Cámara Argentina de la Moda. Una institución que nació en 1905, que no es empresarial, y que nuclea a todos los eslabones de la cadena de valor de la moda. Allí están representados los diseñadores de alta costura, los artesanos, los bordadores, y los numerosos oficios del sector que son más de 20. La CAM entrega el premio más importante de la moda argentina, que son las Tijeras de Plata, y que tiene más de 40 años.
Ayala (link a su página) en diálogo con Sebastián Di Domenica para RadioBillete Podcast, se refirió a la situación actual del sector, luego de la pandemia, y a las perspectivas de exportación del diseño argentino.
«La cadena de valor de la moda es muy amplia y nosotros tenemos un lema: ‘la moda es trabajo’. Una noción que está muy lejos de ese mote de frivolidad que se piensa que tiene. Se estima que la moda es la segunda generadora de mano de obra después de la industria de la construcción», explicó en el inicio del intercambio. Y remarcó que el sector que representa es el que en mayor medida tiene trabajo artesanal para la confección de prendas.
El diseñador explicó que una sola prenda de alta costura conlleva muchas horas de trabajo y una diversidad de procesos artesanales.
Diseñadores y dificultades del momento
Ante la consulta sobre la actualidad del sector, Ayala dijo que éste atraviesa un momento complicado por diferentes motivos que hacen a la economía local: «estamos condicionados por la falta de materias primas. Porque Argentina nunca produjo el tipo de materiales que se usan para hacer vestidos de fiestas. Siempre se han importado. Y en este momento es realmente muy complicado conseguirlos. Y dificulta la actividad», afirmó.
También señaló que los diseñadores tienen una fuerte presión impositiva: «el 50 por ciento del valor de una prenda está relacionada con los impuestos. Esa es una realidad», dijo.
Por último, también con relación a las dificultades en el escenario actual, el modisto explicó que es muy difícil conseguir mano de obra calificada para trabajar en el desarrollo de las prendas de alta costura: «hay mucha gente interesada y que estudia diseño de moda, pero los oficios de la moda no se estudian, porque en gran medida se transmiten, por el alto porcentaje artesanal de la actividad», explicó.
Moda después de la pandemia
La actividad de la moda de alta costura atravesó un momento muy difícil por la pandemia, ya que durante un extenso tiempo estuvieron cerrados los locales, y aún cuando se abrieron, seguían las restricciones para las fiestas y los eventos: «podíamos trabajar pero nadie necesitaba vestidos», detalló.
«Finalmente cuando se permiteron las reuniones, de golpe surgió todo el trabajo acumulado. Había gente que había esperado dos años para casarse. Fue como una primavera. Y ahora estamos con otros problemas, porque por la incertidumbre del dólar, muchos postergan para más adelante», aseguró.
Diseño de exportación
Ayala se refirió también a la necesidad de incorporar a la producción de moda local, los materiales y fibras que nos pertenecen, «como son los camélidos», detalló.
Y remarcó la necesidad de salir de los manejos hegemónicos de la actividad: «la moda argentina siempre fue reflejo de lo que ya pasó en Europa. Históricamente siempre se transmitió de arriba hacia abajo. Sale de París y se debe adoptar aquí», comentó.
«Nosotros abogamos por procesos propios para ofrecer productos que sean únicos», remarcó. Y siguió: «debemos desarrollar recorridos creativos que nos pertenezcan y así nuestro trabajo tendría una soberanía mucho mayor», analizó.
En el cierre de la entrevista, el diseñador aseveró que la moda de alta costura de Argentina tiene un enorme potencial de exportación: «se distingue por su inmensa creatividad. Y por la extensa trayectoria, tenemos muchas posibilidades para destacarnos en el mundo con el oficio de hacer vestidos a medida», concluyó.
Escuchar el audio completo de la entrevista: